18 octubre 2006

El paradigma MAFO

Hola, queridos lectores.

Hoy, después de algún tiempo sin actualizar el blog (por lo cual os pido disculpas), os traigo una noticia aparecida en 'elconfidencial.com'.

Antes que nada, recordemos que desde que Miguel Angel Fernández Ordóñez (MAFO para los amigos) empezó a sonar como sustituto de Jaime Caruana para el cargo de Gobernador del Banco de España, se ha tenido una cierta sospecha de que el nombramiento respondía más a una necesidad política que técnica, quizás (digo yo) porque se necesite a alguien que sea capaz de capear un temporal más que de informar (¿alarmar?) con mensajes técnicos y objetivos. Y para esta tarea de decir medias verdades, ocultar la realidad y mentir de soslayo nadie mejor que un político...

Bien, aquí está la noticia:

MAFO, el optimista

El artículo comienza exponiendo que, básicamente, hay dos grupos de pensamiento entre los economistas en relación al endeudamiento familiar:

  • Aquellos que piensan que, como los pisos ahora valen varios cientos de miles de euros más, pueden servir para afrontar las deudas basándose en que la riqueza patrimonial del propietario se ha multiplicado.
  • Aquellos que piensan que el endeudamiento lleva aparejado un riesgo, independientemente de que el patrimonio haya aumentado.
Pues bien, la noticia continúa diciendo que nuestro nuevo gobernador, en el estreno de su flamante cargo en su primera comparecencia en el Parlamento, se ha apuntado al carro de los optimistas.

Desde mi punto de vista, sólo existen dos causas para que nuestro nuevo gobernador se haya alineado con semejante "paradigma de crecimiento": o es un ignorante, o es un mentiroso.

Y la verdad, prefiero que sea lo segundo a lo primero; así, al menos, podemos concederle el beneficio de la duda pensando que lo hace por tranquilizar a los ciudadanos intentando actuar como dique de contención para evitar un desplome de la economía. Porque si resulta que todo un Gobernador del Banco de España es tan ignorante como para creerse el desvarío que se extrae de sus propias palabras, entonces vamos muy, pero que muy mal...

Siguiendo este paradigma, se podría conseguir el crecimiento eterno simplemente a base de valorar cada vez más cualquier activo (como por ejemplo las viviendas) y después endeudarse teniendo como 'garantía de pago' ese mismo activo. Vamos, que el dinero para saldar la deuda está ahí, existe, lo tenemos... sólo que enterrado en un montón de ladrillos que tendremos que vender para poder conseguir ese dinero. Y venderlo al precio que es considerado "de mercado", es decir, el precio aumentado.

Pero parece que se está obviando el hecho de que muchas de estas familias endeudadas lo están porque han comprado algo que necesitan, la vivienda, y no un activo financiero del cual poder desprenderse si hace falta el dinero. ¿Cuántas de esas personas endeudadas podrán deshacerse de su casa sin modificar sustancialmente su modo de vida? Es decir, ¿realmente es posible deshacerse de ese activo financiero en caso de necesidad, igual que se deshacen posiciones en bolsa, en el mercado del oro o en cualquier otro mercado financiero? Y otra pregunta más: si un sector amplio de endeudados por la hipoteca intenta deshacerse de su casa a la vez, ¿obtendrán el hipotético precio de mercado en un contexto de alta oferta y baja demanda?

No sé a vosotros, pero a mí esto me recuerda al mercado de Wall Street allá por 1929. En esa época se permitía la compra de acciones a través de una garantía: la compra de acciones no requería disponer de todo el dinero que valían, sino que se compraban depositando una garantía que solía ser del 25%. Así alguien podía comprar, por ejemplo, 10.000$ pagando sólo 2.500$ y endeudarse por los otros 7.500$. Las propias acciones compradas ejercían de aval por los 7.500$ de deuda. En otras palabras, las acciones se compraban a crédito. Y para colmo, la gente compraba las acciones cuanto antes porque existía la creencia de que en unas pocas semanas valdrían mucho más caras y podrían quedarse fuera del mercado.

En esa época incluso algunos grandes economistas pensaban que se había logrado un nuevo paradigma económico de eterna prosperidad. He aquí algunas citas de estos inteligentes señores (lo de 'inteligentes' lo digo en serio):
No habrá interrupción en nuestra permanente prosperidad
Myron E. Forbes, 12 enero 1928

Los precios de las acciones han alcanzado lo que parece un valor permanentemente alto
Irving Fisher, 17 Octubre 1929

A pesar de su gravedad, creemos que la caída de los precios de las acciones sólo refleja demuestra un movimiento intermedio y no el inicio de una depresión
Harvard Economic Society, 2 Noviembre 1929
Hoy en día se está permitiendo la compra a crédito y el endeudamiento masivo basado en la garantía que ofrece el activo que se compra: la vivienda. Las tasadoras aumentan mes a mes el "precio de mercado" de las viviendas; su valor sube como la espuma y ello permite el préstamo de mayores cantidades, que son empleadas también en otros gastos de consumo, por ejemplo vía refinanciación.

Antes de seguir, y para curarme en salud por si alguien argumenta que el mercado de acciones no es comparable al mercado inmobiliario, no voy a negar que existen ciertas diferencias entre ambos mercados, ya que una parte de los compradores de vivienda no han realizado la compra como inversión sino para vivir en ella; y obviamente, la posesión de acciones es prescindible, mientras que la vivienda es una necesidad básica. Pero tampoco negaremos que hay unas cuantas similitudes que sirven de apoyo a la comparación con la bolsa de Wall Street en 1929:
  • La compra se hace a crédito con la garantía que ofrece la propia vivienda (a veces también se requieren avales adicionales).
  • Una gran parte de los compradores ha comprado la vivienda, incluso endeudándose al límite, por el miedo al "mañana será más caro".
  • Una parte importante de la demanda es puramente especulativa, y un porcentaje significativo de ésta ha comprado a crédito y sin capacidad de, llegado el caso, hacer frente a los pagos.
  • Incluso para los compradores no especulativos, la compra de una vivienda siempre se toma como una inversión o un ahorro a largo plazo.
Bien, nuestro MAFO, además de ser tan inteligente (¡o más!) como los economistas del 29, también es igual de optimista y piensa que estamos en un nuevo paradigma de permanente prosperidad, y que la compra a crédito de pisos nos llevará a un estado de riqueza infinita. ¿Pero de verdad se lo cree o simplemente pretende calmar los ánimos? Es decir, ¿lo dice por ignorancia o lo dice a modo de mentira piadosa?

¿Realmente alguien se cree que esto se puede mantener durante mucho tiempo? En este otro artículo de este mismo blog publiqué unas reflexiones de un forero llamado 'Luisito'. Extraigo un pequeño párrafo:
El barrio de Lavapiés, por poner un ejemplo, ha multiplicado su valor contable (su valor de tasación) por tres en unos pocos años. Este aumento de valor contable se ha logrado "porque sí", sin inversiónes, sin trabajo ni aportación de valor añadido. Este valor contable tres vaces mayor permite a los habitantes de Lavapiés obtener un volumen de crédito tres veces mayor, pero nada más. Los habitantes de Lavapiés no han multiplicado sus ingresos ni la facturación de sus negocios ni su capacidad de producir riqueza; sólo han aumentado su capacidad de endeudarse y se han endeudado.
Volvemos a la pregunta: ¿es esto sostenible? Aumento de valor contable "porque sí", sin inversiones, sin trabajo, sin aportación de valor añadido. Las acciones de una empresa suben como la espuma a pesar de no tener activos, ni actividad conocida, ni repartir beneficios... ¿Os suena a algo?

Se han vivido muchas burbujas a lo largo de la historia, y en todas ellas siempre hay quien ha creído que el tinglado era sostenible, pero al final la realidad es muy tozuda. Así que, una de dos: o MAFO nos dice la verdad y nos encontramos en el nuevo paradigMAFO económico o MAFO nos miente (piadosamente, eso sí) y la que nos espera es como para echarse a temblar.

La realidad despejará las dudas dentro de un tiempo...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No nos dejes tanto tiempo sin tus reflexiones porque nos da "mono".

Hipotecatombe dijo...

Gracias por el apoyo. Ahora mismo acabo de publicar un nuevo artículo. Espero que también te guste.

Un saludo.